Conozco La Venta del Alto  por unos amigos que se han casado allí recientemente: han celebrado su boda en Sevilla, en El Garrobo. Y me llama la atención no ya la alabanza de sus instalaciones: un amplio salón para 400 personas, con ese encanto que cada vez es más difícil encontrar, sino la descripción de lo que parece ser una Venta tradicional sevillana, de estos sitios que se les nota que tienen solera…pero, que ofrecen todas las comodidades de un alojamiento de nuestro tiempo.. ¡Como no!

Allí que me fui a entrevistar a Pedro Vázquez, su Director y propietario: ¿y esto de la Venta del Alto?Bueno, se sonríe, posiblemente desde el tiempo de los romanos, este sitio fuera lugar de parada y descanso, tanto para las personas como las caballerizas. Estamos en plena ruta de la plata: por aquí pasaba todo el mineral del norte de España a embarcar hasta Roma por los puertos de Híspalis y Gadir. La Venta está justo arriba, en la cuesta de la media fanega y después de semejante repecho, era lógica la parada… por cierto, se llama la cuesta de la media fanega porque era el precio del alquiler del mulo para subirla…

La Venta del Alto pertenece a mi familia desde hace dos generaciones, y desde entonces ha sido un negocio netamente familiar. Esto le imprime un carácter específico: el trato con nuestros clientes es muy cordial. 



En La Venta del Alto, !como no! Se puede disfrutar de la gastronomía propia de la sierra de Sevilla: Caza, carnes, revueltos, jamón de la sierra de Huelva (que está a media hora por carretera) postres… Igualmente nuestro hotel, con 18 habitaciones permite el alojamiento y disfrutar de fines de semana de autentica paz. Cuenta con un gran patio interior donde destaca una higuera espectacular, lleno de rincones para la lectura o la simple meditación. Hay que saber buscar el mejor lugar entre sol y sombra… pero ojo: Corremos el riesgo de echar una cabezadita arrullados por el canto de los gorriones…

Caramba, pienso… !que buen lugar para celebrar cualquier cosa! Una boda, una comunión, una reunión de trabajo o lo que sea… además del gran salón, La Venta tiene un disco pub y otro salón mediano para 200 personas, además del comedor y barras del restaurante, donde en Invierno colocan braseros de cisco!! Sí, sí… cisco de encina! 



Y bueno, ya no escribo más… me siento a la mesa donde me espera un jamoncito riquísimo, un revuelto de espárragos trigueros y un “venao” con tomate y… y no les doy más envidia… esto hay que venir a verlo. Que estupendo son algunos reportajes!!